Fundación de la Danza "Alicia Alonso" ISSN-e: 1989-9017
Fundación de la Danza "Alicia Alonso" ISSN-e: 1989-9017

AMORES PERROS

Personajes y significado dentro de la estructura

La estructura de Amores Perros relata la historia de tres personajes totalmente distintos en la mayor parte de las características que se les pueden atribuir a cada uno de ellos, pero que poseen en común el hecho de perseguir un deseo, dentro de lo que para cada uno de ellos significa llegar a tener una vida mejor, o lo que podríamos identificar con la felicidad. Estos personajes son Octavio, Valeria y el Chivo.

Octavio es un joven de unos veinte años aproximadamente, perteneciente a la clase obrera o más bien al lumpen proletariado y cuyo deseo es irse a Ciudad Juárez con Susana y el hijo de ésta, lo que para él significa salir de su contexto de miseria y vivir un mundo mejor. Cambiar su realidad.

Valeria es una mujer adulta, modelo y de clase alta. Se trata de un personaje superficial que identifica la felicidad con el éxito social, ya que es lo que le ha permitido conseguir su dinero, su pareja etc.

El Chivo es un hombre maduro que, aunque ahora se dedique a mendigar y a ser asesino a sueldo, proviene de clase media- alta (fue a una universidad privada). Su situación actual se debe a su pasado de guerrillero y preso. El deseo que persigue es recuperar a su hija, que le cree muerto.

La estructura narrativa de esta película supone un ingrediente indispensable para poder establecer la relación deseada entre los personajes, en especial por medio del accidente y también por medio de sus perros, lo cual será determinante para el contenido y el mensaje fundamental que transmite el film.

El accidente es un punto determinante para todos los personajes ya que marca un punto de inflexión en la historia de todos ellos porque supone una pérdida importante en sus vidas: para Octavio y Valeria supone la pérdida de lo que más valoran (el dinero que le permitiría a Octavio irse a Ciudad Juárez con Susana, y la pierna indispensable para el trabajo de modelo que le proporciona fama, éxito y dinero a Valeria); para el Chivo supone también una pérdida importante, los perros que actúan como su familia, pero hay una diferencia muy importante con Octavio y Valeria, y es que este hecho será determinante para que se de cuenta de que debe volver a buscar lo que él había perdido previamente (lo que más quería), es decir, recuperar la pérdida más importante de su vida que es su hija Maru.

También es fundamental resaltar el propio orden de las historias: primero la del joven Octavio, después la de la adulta Valeria y finalmente la del maduro Chivo. Esto supondría, pese a lo que puede parecer la película en una lectura superficial, una estructura lineal (la vida) en el contenido y más aún si tenemos en cuenta que el conjunto de la película cobra sentido en el último relato: el del Chivo.

Por otro lado, si al llegar al final del film, hacemos una lectura a la inversa, es decir, en sentido contrario, del final al principio, nos daremos cuenta de que la historia de Valeria en primer lugar y la de Octavio en segundo lugar, pueden identificarse como los errores fundamentales cometidos por el Chivo a lo largo de su vida: Valeria representaría el éxito social y la superficialidad de la clase social de la que proviene el Chivo y por lo tanto su vida en un principio; Octavio sería en cambio la ambición de tratar de buscar un mundo mejor para vivir ( Ciudad Juárez con Susana), lo cual encaja con la decisión del Chivo de irse a la guerrilla (tal y como le cuenta a su hija Maru en el mensaje que le deja en el contestador).

Esta lectura nos lleva directamente a relacionarla con la Teoría del Eterno Retorno elaborada por Nietzsche, que consiste en aceptar que todos los acontecimientos del mundo, todas las situaciones pasadas, presentes y futuras se repetirán eternamente, tal y como sucede en las vidas de Valeria y Octavio, ya que repiten los errores del Chivo.

No obstante, la historia del Chivo supondría una superación dialéctica de esos errores que han supuesto la pérdida de los que más quería, representados en las historias de Valeria y Octavio, que culmina con un cambio fundamental en su vida, ya que deja su trabajo de asesino a sueldo (recupera su dignidad en el momento en el que decide no asesinar a Cofi), abandona su estética de mendigo y le cuenta a su hija por medio del contestador toda su verdad, enfrentándose a todos los errores cometidos y afrontándolos de manera valiente. Esta superación se advierte en concreto cuando le deja todo el dinero que ha conseguido bajo su almohada (el éxito y la fama de Valeria) y admite que fracasó en su intento revolucionario (búsqueda de un mundo mejor de Octavio).

Esta superación dialéctica tiene su punto álgido en la última escena de la película, cuando el Chivo, ya Martín, marcha caminando por un descampado yermo hacia el horizonte, suponiendo esto un canto a la esperanza y la superación de toda una vida de errores con consecuencias dramáticas.

La estructura narrativa de Amores Perros, con toda su complejidad, permite no sólo esta reflexión sobre la vida, sino llegar mucho más allá. El hecho de que retrate distintas clases sociales (con unas diferencias tan marcadas en México) para contar las tres historias, permite una crítica brutal al sistema y a la sociedad mexicana: la clase obrera se ve obligada a delinquir para sobrevivir; la clase alta es superficial y corrupta; y finalmente, este México compuesto por todos ellos, movido por la violencia que provoca el dinero (tanto su ausencia como su posesión) supone un caos absoluto e incluso la barbarie, el machismo, el desastre.

Además, si se tiene en cuenta el contexto de la sociedad mexicana en el momento en el que se elabora la película nos daremos cuenta de que el fondo de la película va incluso más allá. Amores Perros es un film del año 2000, año en el que se produce por primera vez en 71 años (durante los que había gobernado el PRI) la alternancia política cuando una alianza de los partidos Acción Nacional y Verde Ecologista de México derrota al PRI en las elecciones presidenciales, lo cual supuso en ese momento un baño de esperanza en el cambio para la mayor parte de la sociedad mexicana.

Precisamente por este detalle, podemos decir que el maduro Chivo representa a la madura sociedad mexicana, que ha superado los errores de su historia, de su vida, mira hacia el horizonte del yermo descampado con ojos de esperanza. Esto es, que a pesar de las apariencias, Amores Perros no cuenta tres historias que chocan accidentalmente en el camino, sino que cuenta una sola: la historia del pueblo mexicano.

El tratamiento de la violencia en Amores Perros

Amores Perros adopta un punto de vista bastante peculiar para retratar la violencia, y que se adapta perfectamente para conseguir la sensación deseada en el espectador sin ser absolutamente explícito. Utiliza la elipsis de una forma inteligente, de manera que le da más intensidad a las escenas de las que quieren resaltar la violencia: las más importantes.

Debemos tener en cuenta que se trata de una película que pretende retratar una sociedad extremadamente violenta como es la mexicana, y precisamente este aspecto es el que desata la violencia más explícita en toda la película. Esto es, que, si observamos además el origen de la violencia en todos los aspectos reflejados en el film, el resultado es que la adquisición dinero es la justificación en todos los casos, independientemente de la clase social o la historia (de las tres que se narran).

Esa persecución del dinero motiva y da a entender que se trata de algo bastante generalizado en la sociedad mexicana, y la representación de México que pretende ser la película, con toda su escasez, brutalidad y caos se muestra por medio de las escenas que contienen violencia explícita. Por ejemplo: la paliza que le dan a Ramiro, el atraco y la muerte de Ramiro a causa de un disparo en el banco, las sangrientas peleas de perros, los gritos en las discusiones de Valeria y Daniel, el disparo a sangre fría del Chivo al hombre que está en la cafetería, las persecución de los aliados del Jarocho que, a punta de pistola, pretende matar a Octavio y su amigo, la puñalada que Octavio propina al Jarocho etc, entre otras.

Todas estas escenas son las que permiten al espectador ver “en directo” cómo se ejecuta el acto violento, lo que además se ve reforzado por la sangre, las cicatrices, los gritos e insultos etc. No obstante, a pesar de que se trate de violencia explícita también existe una intención de no dejar verlo todo, si tenemos en cuenta que la hipervisibilidad no es algo que se pueda aplicar a esta película. Incluso en las sangrientas peleas de perros o en la paliza de Ramiro hay cierta contención a la hora de mostrar: no es una película morbosa en absoluto a pesar de que lo cierto es que tendría grandes riesgos de haber sido así por su propio contenido.

Por otro lado, los momentos mas importantes de la película en los que la violencia también está presente se tratan de un modo distinto: nunca nos muestran la violencia en sí, sino las consecuencias de esa violencia, lo cual consigue un efecto más intenso en el espectador y una emoción superior al otro tipo de escenas violentas que ya hemos analizado.

Estos casos se ven de forma muy clara en distintos momentos de las tres historias que narra la película: la oreja desgarrada de Susana (que hace entender que sufre malos tratos), los aullidos de Richie (que quieren decir que está atrapado debajo de la tarima y está siendo devorado por las ratas), la imagen de Valeria sin pierna (se la han amputado), los perros muertos del Chivo (los cuales han sido matados por “Cofi”, el perro de Octavio, recogido por el Chivo en el momento del accidente) etc. En todos estos casos la mostración de las consecuencias de la violencia invita a la participación de la imaginación del propio espectador para recrear la violencia en sí y provocar un efecto mucho más horrorizante que la violencia explícita. Esto se suma a que se trata de momentos fundamentales desde el punto de vista emotivo, lo cual provoca las sensaciones más intensas de la película.

ACIERTOS DE AMORES PERROS.
Cómo percibimos el México que nos cuenta: MOVIMIENTO DE CÁMARA

Para mí el mayor acierto de esta película ha sido conservar unicidad en tanta mezcla. El movimiento de la cámara or momentos se parece al de un documental, por momentos, el plano es absolutamente subjetivo y nos parece ir en el coche,de la escena con la que arranca la película, también influye el ruido de la vía, la vertiginosidad de la escena, hasta en el propio lenguaje… como pasamos a losplanos larogos y fijos de las otras dos historias; o a los lanos donde sólo intuímos, escuchamos lo que ocurre, sin saber bien lo que está pasando, porque quizá no hay ninguna palabra; nos lo deja todo , a veces, a la imaginación, y otras, entra en la misma herida, acercando la cámara, subjetivándola y haciéndonos poner en el papel del mismo retratado; del mismo perro. En esa primera escena estamos más con la vida de Cofe que con esos dos muchachos a los que no entendemos; ¿ocurrirá lo mismo en otros lugares de México con este lenguaje? Pienso que sí. Creo que hay una estilización del lenguaje callejero.

ESTÉTICA DE LA PELÍCULA

Definitivamente nos coloca en la realidad; una realidad estilizada; cuando se emplea el término estilización no tiene por qué ir referido sólo a lo bello; aquí hay también una estilización un artificio de lo sórdido. Una especie de homenaje a lo sórdido desde el realismo manipulado; maravillosamente manipulado. La luz del apartamento de Valeria, la propia luz del coche del principio, la luz del lugar del Chivo, son totalmente distintas; su tratamiento. Las tres son realistas; cada una nos da una realidad diferente. La de los muchachos es la que tiene color más vivo, más llamativo del rojo; es cálida , cercana, y lejana por el aspecto documental de momentos; la de Valeria está acabada en pasteles; la luz matizada, hasta los gestos que realiza; bajar la persiana; hay más tiempo; hay otra suavidad; es lo que no vemos, sabemos que sucede, pero no podemos hacer nada para remediarlo, y NADA CAMBIA,. La del Chivo tiene un predominio de fríos: azules y grises, pero intensos; nos acerca a un mundo que no nos pinta atractivo, como en un momento dado podría ser el de los jóvenes, aunque sólo fuera por el amor. Quiere que nos metamos , pero que no nos guste demasiado lo que vemos.

ATMÓSFERA DE LA PELÍCULA

Hay una incesante intriga que sobrevuela toda la película; a veces más tranquila, a veces, hasta respiramos, pero al estar tan bien construídas las tres historias vivimos tres puntos climáticos diferentes; las escenas est ́an montadas de tal manera que podemos coger aliento , pero rápidamente entraremos en el conflicto de la siguiente historia que será más climático y a la vez, nos aclarará contenido providencial de la siguiente; es una concatenación rítmica de contenido y forma ágil e intrincada. Desde luego con la sensación de : ESTO SUCEDE. Allí nos lleva, por muy originales que sean los principios de las historias; como decía Mamet en “ Los tres usos del cuchillo”: El espectador aceptará toda la información que le demos si no la contradecimos.

EL TIEMPO

Aquí se ve la mezcla clara. La historia tiene una cronología, aunque no la sigue en el montaje, pero ya hemos hablado de la estuctura; yo qquería rferirme al pasar del tiempo en esta película; volvemos a ver cómo el director maneja sublimemente los tiempos; segundos, los del perro de Valeria agonizando nos parecen días, y después pasan los días y el perro continúa; es un juego permanente con el espectador de acelere y desacelere. Escenas trepidantes, planos secuencia de alguien durmiendo.

LOS SILENCIOS. LOS SONIDOS LOS RUIDOS

Igualmente se alterna el ruido estruendoso que nos lleva a DF, con silencios tremendos; los ladridos de losperros, la jauría, los hombres, con los silencios del Chvo, con los tiempos de miradas; las sonorizaciones no pretenden ser realistas, mejor dicho, como ocurría en “ El día de la bestia” de Alex de la Iglesia, que el sonido de la Gran Vía era realmente Nueva Cork, hay una alteración de los sonido s; a veces, subjetiva del personaje.

LA INTERPRETACIÓN

Es una oportunidad de oro para plantearesa eterna pregunta de si el actor, si está verdaderamente comprometido con lo que hace, padece por ello? Aunque la respuesta habría que preguntársela a los actores dela película, por lo que se observa, mi respuesta sería sí; Otra cosa es si ese padecimiento es doloroso para el actor. Estas magníficas interpretaciones, BRAVO POR GOYA TOLEDO!, esos tiempos de reacción, de miradas, pienso que solo salen del absoluto compromiso con lo que se hace; los sentimientos también son algo a comprometer; el trabajo de observación es revio; la ventaja del cine es que sólo se hace tres o cuatro veces; el organismo lo aguanta; para hacerlo en teatro, pienso que el mecanismo iría mucho más apoyado en la acción.

Bibliografía

SMITH, Paul Julian. “Amores Perros”. Editorial Gedisa, 2005
SÁNCHEZ-BIOSCA, Vicente. “Una cultura de la fragmentación”. Generalitat Valenciana, 1995

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